Uff… me es complicado hablar de este lugar, pero quiero hacerlo ahora, que lo te lo fresquito, pues aún estoy en esta isla.
Pero empecemos por el principio. Esta isla es la última de Japón, la siguiente ya es Taiwan. Pertenece a lo región que se conoce como Okinawa, un conjunto de cientos de islas al sur de Japón, con un clima tropical todo el año (como nuestras Canarias). En el mapa es un puntito casi invisible, pero cuando haces agrandar en Google Maps te das cuenta que realmente es más pequeña de lo que pensabas, pues mide unos 11km de largo por unos 3,5km de ancho, aproximadamente. Aquí no hay supermercados Family Mart o Seven Eleven, sólo hay 4 supermercados familiares diminutos con lo básico para sobrevivir (aunque no falta de nada). En Yonaguni viven unos agradables y simpatiquísimos 1400 habitantes, que no hablan absolutamente NADA de inglés pero que por ello no dejarán de intentar comunicarse contigo y ayudarte en todo lo que les preguntes. De todo Japón, esta gente ha sido la más agradable y abierta que hemos encontrado.
Para llegar es complicado, como no podía ser de otra manera… No hay vuelos directos desde Tokio, así que deberás volar hasta Naha (la isla más grande de Okinawa) o Ishigaki (la isla anterior a Yonaguni), y luego coger otro vuelo a esta isla o un ferry… aunque te recomendamos el vuelo, pues el ferry nos fue imposible reservarlo, sus webs sólo están en Japonés y al traducirlas se convierten en un puzzle de palabras sinsentido que acabaría con la paciencia de un monje tibetano. Los vuelos interiores en Japón son bastantes económicos, pero cuidado con compañía Peach (vendría a ser nuestro Ryanair y te lo pesan todo al gramo, si te pasas, a pagar).
Hay dos núcleos urbanos en Yonaguni, por decirlo así y en ellos hay los pocos alojamientos que podrás encontrar. Olvídate de todo lo que has visitado hasta ahora… esta isla está anclada 50 años atrás y no tiene pinta que vaya a avanzar mucho en los futuros años, aunque el buceo podría convertir la isla en un lugar de peregrinaje de buceadores de todo el mundo y matar esta esencia tan especial que tiene.
Lo que me sorprende más de esta isla es la cantidad de óxido… ¡todo está oxidado! Con lo que me hace pensar que aquí los Tifones son muy duros y mojan de agua salada del mar casi toda la isla, haciendo que incluso los coches acaben oxidados en puntos de su carrocería que nunca había visto (y recordar que tengo un centro de buceo y furgonetas que entran buceadores mojados diariamente…).
Las webs de los centros de buceo de esta isla son las más espartanas que he visto nunca… imposible saber mucho de lo que hacen, donde van, como son sus instalaciones, … así que con este post intento ayudaros con nuestra experiencia, y sobre todo lo que deberíais saber antes de decidir venir a bucear a Yonaguni.
Sólo hay dos centros de buceo que funcionen con extranjeros y ambos no hablan muy bien inglés, o simplemente no lo hablan, así que el Google traductor será imprescindible para comunicarse. Aún así, escribe frases cortas y sencillas, sin dobles sentidos, … ellos leen y muchas veces no lo entienden, nos pasaba continuamente. Aprendimos que debes ser sencillo y concreto cuando utilizas el traductor.
Los dos centros de buceo en Yoanuguni:
- Dive Center Marlin
- Yonaguni Souwes
Ambos centros de buceo tienen un instagram que utilizan muchísimo para presentar lo que ven diariamente. Puedes hablar con ellos directamente por este canal, son rápidos contestando.
Supongo que si estás pensando en venir a bucear a esta isla es por los tiburones martillo. Y haces bien, hay muchos y son gigantes. Sin exagerar miden entre 2 y 3 metros y pueden verse en pequeños grupos de 5-10 individuos o escuelas de decenas o cientos de ellos.
Peeeroooo….. (siempre hay un pero en todo) los buceos son sólo para ¡buceadores/as Advanced! Y rodados. Nada de venir aquí con 30 buceos, vas a morir. Los buceos son extremos y muy profundos, las corrientes son muy habituales y buceas en medio del azul sin puntos de referencia, muchas veces contracorriente. Así que a esto súmale un buen consumo, una buena forma física y unas aletas de verdad (tienes un post sobre aletas en este BLOG, pincha aquí).
La época de martillos en Yonaguni en nuestro invierno, de diciembre a abril.
Cada grupo (barco) es de 10 personas con 2 monitores, uno que dirige el buceo y busca los martillo y otro que lleva carrete con un cable que arrastra una boya que va por superficie e indica al barco donde se encuentra el grupo. Este segundo guía controla el grupo desde mucho más arriba y se ocupa que ninguna oveja se separe del rebaño. Acordaros que vamos a bucear en medio del azul… aquí siempre un ojo al grupo, no te puedes separar de él.
Imprescindible llevar una boya de seguridad por persona (BS), si te pierdes, que los barcos te vean antes de sacar la cabeza del agua.
Los guías deciden donde van a bucear en cada ocasión, y ni idea que criterio usan, nunca llegamos a poder hacernos entender y explicarles los buceos que más nos gustaron para repetir… imposible hasta el punto de desesperación, por ello, no luches con esto, no servirá de nada. Su objetivo es ir a ver tiburones martillo y eso harán.
Día tras día, tres veces al día, se tiran aleatoriamente (o eso creemos), en una zona justo delante de un faro, a unos 200 metros de la agreste costa de lava negra. Desciendes sin mucha prisa a los 20 metros de profundidad y a disfrutar del azul. Literalmente el azul, no hay nada más, ni un pez normalmente o como mucho unos peces cirujano unicornio. De golpe el guía sale “cagando leches” a lo máximo que dan sus aletas hacía no sabes que…. ¡Pero tú corre detrás! De golpe estás entre los 30 y los 45 metros de profundidad, respirando a bocanada limpia y con un banco de tiburones martillos que desparecen en escasos segundos… a veces tienes un poco más de suerte y puedes estar con ellos unos minutos. Si antes de este esprín te pilla cerca del guía, perfecto… pero cuando te pille lejos de él, la has “cagado”… no verás nada o como mucho las colas de los martillos. Moraleja: pégate al guía y sigue su rumbo errático mientras mira su brújula y hace quiebros de dirección que no entendimos nunca. Pero pégate a él/ella y corre como si un demonio te persiguiera cuando él/ella salga disparado/a, no te esperarán, ni se van a girar a ver si les sigues, ni harán un ruido con una maraca, … simplemente salen disparados al detectar tiburones, normalmente un descenso en diagonal. Alucinamos que visión tienen, pero es fe ciega, y si corren es porque los han visto, aunque tú no lo hayas hecho todavía.
Los buceos duran entre 20 y 30 minutos… son muy cortitos. Se pegan su picado para ver martillos y para arriba, no hay un segundo intento. Parada de seguridad de 3 minutos y el barco te recoge en 1 minuto de sacar la cabeza del agua, pues ha estado siguiendo al grupo gracias a la boya del segundo monitor/a.
De los 10 buceos que hicimos aquí, vimos tiburones martillos en 7 buceos, y de estos 7 buceos en 3 fueron casi a tocar y en gran cantidad (decenas de ellos). La media es muy buena.
Pero no es un destino para venir a hacer 2 buceos y listos, es un destino para quedarse 3/4 días y hacer buceo al menos 3 días, 3 veces al día. En los 3 buceos que no vimos nada, no vimos nada, estos buceos son en medio del mar y si no hay martillos no hay opción B. De esto nos quejamos varias veces, pues nuestros mejores avistamientos de martillos fueron en buceos donde se veía el fondo y se buceaba entre unas espectaculares y gigantescas rocas, con bastante vida (tortugas, enormes jacks, atunes, peces cirujano, meros patata, …). Pero no hubo forma de hacerles entender que queríamos ese tipo de buceo…. Depende el guía se acerca más a estas zonas o no, pero es impredecible suponemos por las corrientes. Pero todo son suposiciones.
Entre buceos, una vez llegas al puerto, te devuelven al centro de buceo en unas furgonetas y allí descansas hasta el siguiente buceo. Lo intervalos de superficie son de casi 2 horas, perfecto para eliminar nitrógeno y poder volver a realizar uno de esos picados… cerca del centro de buceo (Dive centre Marlin) no hay nada, absolutamente nada, sólo el aeropuerto a 2 minutos caminando, así que trae cosas para picar compradas en algunos de los supers de la zona. Después del segundo buceo te dan de comer.
Te recomiendo que te saques el traje, lo dejes al sol y te vistas. Así recuperarás temperatura más rápidamente.
Traer un cortavientos para ponerte encima del traje una vez sales del agua, es una gran opción, el viento es frío y durante los escasos 5-10 minutos de navegación de vuelta al puerto con el traje mojado te quedas helado.
En el barco dispone de un barreño con agua hirviendo… coge un cazo que hay dentro y métete agua caliente dentro del traje, ¡es una auténtica maravilla! (Pero vigila, el agua que han vertido dentro de este recipiente está muuuuy caliente).
Si tienes un consumo alto, este lugar a lo mejor no es tu destino de buceo… la botella “normal” es de 10 litros, y la “grande” (como ellos le llaman) de 12 litros… son de acero, no flotan mucho.
En tu primer buceo no habrá un “check dive” de equipo (como en otras partes del mundo), directamente saltas al agua, y al fondo rápidamente, a buscar martillos. El problema de siempre es, ¿cuánto lastre me pongo? Pues como es una botella de 10 litros, y si vas con un traje de 5mm, calcula unos 4kg/6kg, pero si no estás seguro/a, hiper-lástrate y luego vas rectificando en los siguientes buceos, pero ¡húndete! El agua del mar está a unos agradables 23-24 grados, como en la Costa Brava en verano.
Es muy importante que tu regulador sea INT, aquí todas las griferías de las botellas son INT, así que tu primera etapa del regulador deberá ser INT. Pues enviar un correo electrónico al centro de buceo preguntando si tienes adaptadores de DIN a INT, te dirán que sí y al llegar no tienen… simplemente no saben que es eso, aquí no existe, y cuando no saben que contestar dicen que sí a todo. Esto es lo que nos pasó a nosotros. Así que trae tu YOKE desde tu país. Aquí miramos de comprar en en una tienda de buceo en la isla de Ishigaki y tenía un precio ¡¡¡¡¡de 58 euros!!!!!! Mira por internet que es un Yoke, así no hago este post más largo… ;)
Nadie del staff del centro de buceo te va a ayudar en ponerte el equipo a la espalda ni revisarte nada en el barco, se considera que si has llegado a este lugar eres autosuficiente y un buceador/a experto/a. Suele haber olas al salir del puerto y el barco se mueve bastante, así que en el mismo puerto equípate lo más rápidamente, ponte la botella en la espalda y siéntate, así ya estás preparado/a. El tiempo hasta llegar a la zona de los tiburones martillos son escasos 5 minutos de navegación, a veces 10 minutos (dependiendo de la zona de salto).
Olvídate de los briefings pre-buceo y post-buceo, los hacen sólo en japonés. Tu escucha e intenta sacar alguna cosa de los movimientos de sus manos. Al final todo se reduce a seguir al guía o la guía como te hemos explicado antes.
El tema parejas en los buceos en Japón desaparece, aquí no es obligatorio ir cerca de tu pareja de buceo (o como mínimo son cero insistentes en este aspecto)… mientras te quedes a vista del grupo y no superes en profundidad al guía o a la guía no habrá problemas.
Cuidado con el sistema de regulador auxiliar de ellos en un caso de emergencia (te quedas sin aire), me refiero a los japoneses, pues su auxiliar está en el lado izquierdo y no derecho como en nuestro país. Así que en caso de necesitar aire de un compañero nipón, ¡busca al otro lado su regulador auxiliar!
Verás que no hay extranjeros en esta isla, aquí sólo llega turismo nacional japonés. Y llega mucho más a bucear de lo que te piensas. Los japoneses bucean mucho.
The Monument:
A parte de los tiburones martillo, otro gran punto fuerte de esta isla es el punto de buceo The Monument. Es una estructura de unos 200 metros de largo por unos 70-80 de ancho que descubrieron hace relativamente poco tiempo y que se asemeja a una pirámide Maya de estas que puedes ver en Méjico (con diferentes alturas tipo escalones).
Este lugar es simplemente mágico, y aunque no destaca por la cantidad de vida marina, los escalones tallados perfectamente, caminos ondulantes, pasos parecidos a puertas con escalones, grandes piedras perfectamente rectangulares, … todo muy curioso, y más teniendo en cuenta que no se sabe si es una estructura creada por el hombre o por la naturaleza.
Este punto de buceo debes insistir que te lleven, a nosotros ¡nos encantó! Desde el puerto hasta este punto de inmersión vas a tener unos 30 minutos de navegación. El día que vayas a realizar esta inmersión, llévate una bolsa estanca con baterías extras para tu cámara, pues no vas a volver al centro de buceo entre inmersiones, aprovechan la navegación para realizar el intervalo de superficie.
La profundidad máxima fue de 20 metros y poco y en este caso sí que el buceo duró unos 55 minutos, que viniendo de los 25 minutos de media de la zona de tiburones martillo, nos pareció maravillosamente bien.
La isla de Yonaguni:
Para moverte por la isla vas a necesitar moto o coche, y es imprescindible tener el carnet de conducir internacional. Sin este carnet, nadie te alquila nada, y ya puedes insistir, en esto son cerrados. Así que haz este trámite antes de venir a bucear a Yonaguni. Ir en bici es una auténtica locura, hay muchas cuestas… ¡te lo digo por experiencia!
Cada mañana te pasarán a buscar por tu hotel/apartamento/airbnb y luego te vuelven a llevar al finalizar tu día de buceo.
Si vas a bucear, realizarás 3 inmersiones diarias, así que acabarás a las 18h aproximadamente, algunos días antes si te han colocado en el primer grupo (hay dos grupos que salen en distintas horas). Y como hay tan pocos restaurantes, y especialmente en fines de semana, ¡no podrás comer en ningún sitio si no has reservado el día de antes o unos días antes! Así que tu primer propósito es cerrar todas las cenas de la semana en un mismo restaurante o en varios. Como plan B, tienes los supermercados y si tu alojamiento tiene cocina, podrás prepararte algo (cierran a las 20h/21h los supermercados).
Pero prepárate a estar en alojamientos muy sencillos… muy limpios, pero nada bonitos. Reserva con mucho tiempo el alojamiento si quieres venir a bucear a Yonaguni, a nosotros nos costó mucho encontrar un lugar, y fue caro para lo sencillo que era. Una buena opción es que el centro de buceo te lo gestione, lo hacen. Habla con ellos por instagram y te darán opciones. Por escrito si hablan inglés.
El último día no podrás bucear, así que tendrás un tiempo para visitar la isla. Al ser tan pequeña no tiene mucho qué hacer. Llévate crema solar de cuerpo y cara, aquí el sol es fuerte.
El centro de buceo:
Olvídate del Nitrox, es posiblemente el destino menos recomendado para usarlo, pues los buceos superan la profundidad máxima operativa de cualquier mezcla rica en oxígeno para un buceo recreativo. Aunque no encontrarás Nitrox en ningún centro de buceo de la isla.
Las instalaciones de estos dos centros de buceos son sencillas con un toque anticuado (parece que hayan olvidado el mantenimiento y todo se va degradando y oxidando poco a poco), nada que ver con nuestras instalaciones en Tossa de Mar, pero también tienen duchas y agua caliente. Si no tienes toalla pide una, a mí me pasó (no sé si las tienen para clientes o siempre tienen alguna preparada por si alguien se la ha dejado…). Los siguientes días traía la mi hotel.
Los centros de buceo en Yonaguni están preparados para vivir fuera del local, tomando el sol entre buceos o hablando bajo alguna sombra. Si llueve o hace nubes, tienen una zona interior donde esperar mientras pasa el intervalo de superficie. Tráete cosas que hacer, hay mucho tiempo muerto, y los japoneses no son nada habladores, aunque hablen inglés. Si no preguntas, ellos no hablan.
En el centro de buceo dispones de café soluble y agua gratis. También disponen de wifi.
En el Dive center Marlin tienen una especie de caja enorme metálica donde por 20 euros te administran 30 minutos de oxígeno mientras estás tumbado en una camilla. No le encontré mucho sentido, pero si lo queréis probar el último día de buceo, lógicamente eliminaréis nitrógeno mucho más rápido. La verdad, es que no lo venden nada, ni te preguntan si lo quieres hacer, simplemente está allí y si preguntas que hace exactamente, vuelves al problema de la comunicación… no saben muy bien explicártelo, el Google Traductor tampoco lo usan mucho para crear largas respuestas. Así que ni lo intentamos, nos quedamos con la duda. Nunca había visto antes esta opción en un centro de buceo, así que es curioso como mínimo.
Un saludo y espero que os haya podido ayudar